La obra de Federico García Lorca no se deja clasificar con facilidad. En él se aúnan la poesía surrelista y la tradición más popular. Pero fue más que poeta, por mucho que en esta faceta haya sido, tal vez, la personalidad más influyente en la poesía española del siglo XX, pues si se pide citar tres autores dramáticos de ese siglo su nombre siempre figurará en esa lista. También dibujaba, y tocaba el piano.
En el IES hemos tratado de mostrar esa riqueza de planos artísticos en los que se desenvolvió Lorca. La Escolanía del Conservatorio Profesional de Música de Córdoba cantó el Zorongo gitano; la vitrina de la BE expone su obra dramática, y el tablón se completa con una muestra de dibujos y “poesías para llevar”.
Ahora nos queda hacer la reflexión sobre lo que podría haber seguido siendo su producción si el 18 de agosto de 1936, cuando contaba 38 años, no le hubieran puesto el punto y final a esa vida por la vinculación de Federico García Lorca con el Frente Popular y su abierta homosexualidad.
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