Durante la Feria del Libro de Córdoba hemos asistido a la presentación de Palabras envenenadas, XVIII Premio Edebé de Literatura Infantil y Juvenil. En ella, su autora, MAITE CARRANZA, expuso desde cómo se gestó la idea de la novela hasta los objetivos personales, no editoriales, que quiere conseguir con ella una vez en manos de sus lectores/-as.
La génesis parte de su preocupación por la invisibilidad del acoso moral, surgida tras la lectura de la francesa Marie-France Hirigoyen[1] quien apunta en este una secuencia que va desde la seducción, al aislamiento, humillación y la dominación final. Pero fueron dos casos de abuso moral, psíquico y sexual de fuerte impacto mediático (el de Natasha Kampush[2], que salió a la luz en 2006 tras 8 años de secuestro, y el de Elisabeth Fritzl[3] y el denominado monstruo de Amstetten ) los que la decidieron a dar forma a esta novela.
Para documentarse sobre el tema recurrió a distintas fuentes: policiales, bibliográficas, y al testimonio directo recogido en asociaciones y fundaciones contra el abuso sexual, Esto le ha permitido identificar lo que denomina “las tres patas del abuso”, silencio, hipocresía y engaño, tan presentes luego en la novela.
Para documentarse sobre el tema recurrió a distintas fuentes: policiales, bibliográficas, y al testimonio directo recogido en asociaciones y fundaciones contra el abuso sexual, Esto le ha permitido identificar lo que denomina “las tres patas del abuso”, silencio, hipocresía y engaño, tan presentes luego en la novela.
La historia parte de la desaparición no resuelta de una joven y adquiere la forma de una novela policiaca: claridad expositiva, agilidad narrativa, suspense y una temporalidad contrarreloj que incita a seguir leyendo.
En cuanto a los personajes, la protagonista presenta las características del “yo maltratado”: discurso manipulado, sentimiento de culpa, síndrome de Estocolmo, autoestima destruida, humillación, sufrimiento, angustia… Es interesante señalar que junto a ella aparecen tres personajes que son los que permiten resolver el caso, y que estos pertenecen a tres ámbitos imprescindibles para la resolución de los conflictos de esta índole: la madre representa el ámbito familiar; la amiga, al entorno; y el policía, a la sociedad.
En conclusión, Palabras envenenadas es una novela de protagonista, problemática, lenguaje y estructura literaria joven, una obra de la denominada literatura juvenil que admite ser bien acogida por lectores adultos, construida sobre una buena estructura narrativa, que puede ayudar a verbalizar un tema tabú, el problema del acoso sexual en el ámbito familiar, y a visibilizar a las víctimas.
Si es así, se habrán cumplido los objetivos que su autora, MAITE CARRANZA, se propuso al escribirla.
Insertamos un vídeo donde la autora habla de esta obra, así como el enlace a su página personal.
Página personal: http://www.maitecarranza.com/
Notas:
Del libro: http://www.edebe.com/publicaciones-generales/libro-palabras-envenenadas=2881=1=4
De la autora: http://arte-literario.blogspot.com/2011/04/puede-interesarte.html
Insertamos un vídeo donde la autora habla de esta obra, así como el enlace a su página personal.
Página personal: http://www.maitecarranza.com/
Notas:
[1] Es una médico psiquiatra, psicoanalista y psicoterapeuta de familia especializada en la terapia del acoso moral o acoso psicológico.
[2] Joven austriaca que fue secuestrada cuando tenía diez años de edad. Permaneció en cautividad durante más de ocho años, hasta el momento de su fuga en agosto de 2006.
[3] Mujer austriaca que permaneció encerrada en un sótano o zulo subterráneo por iniciativa de su padre, Josef Fritzl, durante 24 años, desde 1984 hasta 2008. Su padre, había abusado sexualmente de ella desde que tenía 11 años. Durante su cautiverio, ella dio a luz a siete hijos.
Imágenes:
Del libro: http://www.edebe.com/publicaciones-generales/libro-palabras-envenenadas=2881=1=4
De la autora: http://arte-literario.blogspot.com/2011/04/puede-interesarte.html
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